El pasado viernes tuve la ocasión de probar el 991 Turbo así que voy a intentar compararlo en pocas líneas con mi 997 Turbo. Sólo lo conduje una media hora así que tampoco pude experimentar con todas las posibilidades que ofrece "el bicho" aunque si que me ha quedado muy claro el comportamiento general del coche.
Estética: El nuevo es menos redondeado (menos "huevito"), da la impresión de ser más bajo, largo y anguloso: Me parece precioso y al natural gana una barbaridad. Por dentro, te ves rodeado de infinidad de botoncitos que al pricipio te abruman y te pierden un poco. En comparación con el 997 parece que vas en una nave espacial. La calidad que se aprecia es intachable.
Conducción: Lo importante ya que todo lo demás es subjetivo. El sonido del motor es más alto en el nuevo y más agradable (sin olvidar que es un turbo). Empezando a circular a ritmo muy tranquilo hasta que el motor alcanza la temperatura de funcionamiento voy probando diferentes configuraciones de cambio y motor. Cuando alcanza la temperatura de servicio y empiezo a explorar las posibilidades del coche (de forma bastante light debido al tráfico existente y a la zona de la toma de contacto) me doy cuenta de que la evolución del modelo ha sido extraordinaria. El cambio PDK me parece sublime (me gusta el cambio manual pero aunque en este nuevo modelo existiera esa posibilidad me decidiría claramente por el PDK). Los frenos, perfectos para la el uso que le di y no noté apenas diferencias con el mío (llevaba discos de acero). La progresividad del motor me ha parecido superior y empieza a empujar con fuerza a menor régimen de revoluciones (en marchas largas y acelerando suavemente responde un poco antes que el 997). Acelerando más a lo bestia y en marchas cortas el empuje es bestial y la diferencias de prestaciones que aprecio son ligeramente favorables al 991 pero pienso que es más bien por la inmediatez del cambio de marchas (aunque la potencia pasa de 480 a 520 CV). Volviendo al tema del sonido del motor, me ha sorprendido muy gratamente que al dejar de acelerar o al reducir aparece un delicioso petardeo en los escapes (esta chorradita me ha encantado). Por último, el comportamiento del chasis me ha dado una sensación de coche mucho más ligero en las curvas (supongo que será por toda esa tecnología mágica que Porsche ha aplicado: PTV, PDCC, ruedas traseras qu giran, etc.). Parece menos 911 y a algunos de vosotros os parecerá que ha perdido parte de su esencia pero el comportamiento es muchísimo más efectivo (a mi me ha encantado). La eficacia es claramente superior y te das cuenta del ritmo al que vas cuando te comparas con el resto de coches que circulan a tu lado (mejor dicho que desaparecen detrás de ti).
Conclusión: Realmente espectacular. La primera vez que probé un 911 Turbo me dije que era el primer coche que conducía que me había parecido que corría más de lo que me esperaba con un comportamiento y sensaciones insuperables. Con esta nueva evolución pienso exactamente lo mismo pero "más, mucho más".
Estética: El nuevo es menos redondeado (menos "huevito"), da la impresión de ser más bajo, largo y anguloso: Me parece precioso y al natural gana una barbaridad. Por dentro, te ves rodeado de infinidad de botoncitos que al pricipio te abruman y te pierden un poco. En comparación con el 997 parece que vas en una nave espacial. La calidad que se aprecia es intachable.
Conducción: Lo importante ya que todo lo demás es subjetivo. El sonido del motor es más alto en el nuevo y más agradable (sin olvidar que es un turbo). Empezando a circular a ritmo muy tranquilo hasta que el motor alcanza la temperatura de funcionamiento voy probando diferentes configuraciones de cambio y motor. Cuando alcanza la temperatura de servicio y empiezo a explorar las posibilidades del coche (de forma bastante light debido al tráfico existente y a la zona de la toma de contacto) me doy cuenta de que la evolución del modelo ha sido extraordinaria. El cambio PDK me parece sublime (me gusta el cambio manual pero aunque en este nuevo modelo existiera esa posibilidad me decidiría claramente por el PDK). Los frenos, perfectos para la el uso que le di y no noté apenas diferencias con el mío (llevaba discos de acero). La progresividad del motor me ha parecido superior y empieza a empujar con fuerza a menor régimen de revoluciones (en marchas largas y acelerando suavemente responde un poco antes que el 997). Acelerando más a lo bestia y en marchas cortas el empuje es bestial y la diferencias de prestaciones que aprecio son ligeramente favorables al 991 pero pienso que es más bien por la inmediatez del cambio de marchas (aunque la potencia pasa de 480 a 520 CV). Volviendo al tema del sonido del motor, me ha sorprendido muy gratamente que al dejar de acelerar o al reducir aparece un delicioso petardeo en los escapes (esta chorradita me ha encantado). Por último, el comportamiento del chasis me ha dado una sensación de coche mucho más ligero en las curvas (supongo que será por toda esa tecnología mágica que Porsche ha aplicado: PTV, PDCC, ruedas traseras qu giran, etc.). Parece menos 911 y a algunos de vosotros os parecerá que ha perdido parte de su esencia pero el comportamiento es muchísimo más efectivo (a mi me ha encantado). La eficacia es claramente superior y te das cuenta del ritmo al que vas cuando te comparas con el resto de coches que circulan a tu lado (mejor dicho que desaparecen detrás de ti).
Conclusión: Realmente espectacular. La primera vez que probé un 911 Turbo me dije que era el primer coche que conducía que me había parecido que corría más de lo que me esperaba con un comportamiento y sensaciones insuperables. Con esta nueva evolución pienso exactamente lo mismo pero "más, mucho más".
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